Detrás de sus lentes recetados, su mirada atenta y su ágil atención en la tienda de su propiedad llamada Quiosco La India, se encuentra una persona que a la edad de 53 años ha sido pieza clave en el engranaje social y deportivo del sector de Los Cerros; se trata de John Jairo Ríos Pulgarín, un líder social que ha incentivado en los habitantes de su barrio y de Buenos Aires el amor por el deporte y la participación social por más de 35 años y que hoy es el ejemplo de constancia, disciplina y entrega, que ha llevado a los diferentes conjuntos deportivos, a toda una hinchada y público en general a empoderarse de los espacios sociales, culturales y deportivos en la 9.
“En esa época yo recuerdo que había un programa de la Alcaldía de Medellín que se llamaba Cuadras Recreativas y a mí me gustó llevar a cabo estas actividades con los niños, el Inder nos daba los implementos y realizábamos toda clase de juegos y recreaciones con los pequeños (…) En diciembre recogíamos dulces y armábamos los paqueticos y los compartíamos con las mamás y fue muy bonita esa experiencia de compartir con la gente”.
Llega el Chicho a Medellín
Oriundo de Quinchía, Risaralda, a la edad de cinco años llegó al municipio de Itagüí, pero rápidamente, a los 14 años, John Jairo, más conocido como “Chicho”, arribó al barrio Los Cerros, franja dos de la Comuna 9, más tarde en su adolescencia prestó servicio en Urabá, no sin antes trabajar como caficultor en diferentes zonas de Antioquia.
“Una adolescencia muy difícil porque rodaba mucho y de un momento a otros quise terminar mi bachillerato y vagaba mucho como todo joven de esa época, pero alguien me ofreció coger un pequeño negocio que estaba cerca a la cancha de Los Cerros (…) Era una pequeña carpa a manera de tienda y desde allí vi cómo se movían los equipos de fútbol, de ahí me surge todo este llamado de involucrarme con este deporte, tanto así que hice una capacitación en el Sena acerca del componente deportivo”.
Amor por el territorio y gestión a muchos niveles
Presidente y vicepresidente de la Junta de Acción Comunal de Los Cerros en diferentes ocasiones, gestor cultural, social y deportivo, recreacionista, ventero en sus tiempos libres y todo un personaje de que ha enriquecido de sano esparcimiento a Buenos Aires y a la ciudad de Medellín.
“Yo recuerdo que con lo que se conocía en esa época como el POAI (Plan Operativo de Inversión Anual), logré gestionar 60 millones para arreglar la cancha del barrio y con ello me conoció más gente e hicimos muchos torneos (…) Más adelante realicé, gracias al Inder en convenio con el Sena, una formación y logré graduarme como Tecnólogo en Gestión Deportiva y Recreativa, esto me sirvió de incentivo para mover todo lo relacionado con aprovechamiento del tiempo libre y la actividad deportiva y junto a Nora Calle conformamos una corporación llamada Corporación Cerros Grandes, ya hace casi 15 años; dedicada a la cultura, el deporte, la recreación y en cierta medida al componente de infraestructura”.
Un universo de amplias proporciones
Chicho recuerda con gran aprecio y agradecimiento a la lideresa Gloria Elena Sánchez, ya que con ella llevó a cabo gran parte de su labor con los niños y adolescentes. Pero no solo el componente deportivo copa los días del Chicho, en su quehacer ha sido gran partícipe del desarrollo social y urbanístico del sector; las justas deportivas, la consolidación del Coliseo de Los Cerros, los eventos decembrinos y labores de infraestructura y gestión también son una importante parte de su vida y búsqueda.
“He sido líder deportivo, pero también he gestionado obras de infraestructura para el barrio como puentes, senderos, barandas, así como ejercicios ambientales para mejorar y limpiar los acuíferos como la Quebrada La India (…) Yo no soy de los que me gusta mostrarme, prefiero la sencillez, disfrutar con la gente, hacer las cosas, y siempre a final de año realizamos muchas actividades y eventos para todas las edades, con las familias y vecinos. Yo vivo muy contento donde estoy, este es mi universo, me encanta ver como todos la pasan bien con los partidos, eso hace que la gente se una y se creen lazos muy fuertes de amistad y convivencia”.